Voy a contar un poco como surgió la idea de hacer el primer viaje junto a mi novia a Europa, por lo que el posteo va a ser un poco largo, espero no les resulte tedioso...
Era el año 2014 y en mi país, Argentina la economía estaba bastante complicada. Cepo cambiario, devaluación, dolar/euro caros, por lo que apenas comentamos que nos queríamos ir de viaje muchos nos dijeron "no es el momento".
Siempre fui cabeza dura y me puse a investigar absolutamente todo. Era la primera vez que salía de país y sumado a eso ni siquiera había viajado a Buenos Aires para visitar la ciudad, simplemente había estado de paso por Aeroparque.
Era todo bastante novedoso, pero mi terquedad fue más fuerte y comenzamos no sólo a ahorrar comprando los euros que en ese momento la AFIP me autorizaba y también pesos para poder comprar algunas cosas desde acá en cuotas o en efectivo.
Yo estaba trabajando desde hacía algunos meses y como vivía con mis padres, podría ahorrar bastante de ese total y la gran mayoría iba destinado al viaje. Eso me permitió tener en poco meses un capital bastante interesante y hacer que el sueño europeo se acercara cada vez más.
El 07 de julio de 2014 sacamos el vuelo que era de ida y vuelta Buenos Aires-Florencia, con escala en Roma. El precio fue para los dos $23.210, con todos los impuestos… que nostalgia jaja La plataforma que usamos en ese momento era Atrapalo! de Argentina, porque nos ofrecía un buen combo de cuotas con tarjeta y la posibilidad de pagar con transferencia bancaria porque teníamos que hacer mitad y mitad.
Nos cansamos de buscar alternativas pero la más económica que encontramos era a través de Alitalia, que tenía como característica particular que salía más barato yendo a Florencia con escala en vez de llegar a Roma. Como teníamos pensado conocer esa ciudad nos venía al pelo.
Salimos el 21 de enero desde Buenos Aires.... El día anterior ya habíamos volado de Neuquén a CABA... Ese era nuestro primer viaje internacional, de ahí que no reparamos tanto en que teníamos una escala importante DE 8 HORAS. No se como nos pareció que no era tanto y por ahorrarnos unos pesos decidimos sacar ese pasaje igual.
Claramente hoy, tomaríamos una decisión distinta, pagando un poco más pero con una escala no tan importante, pues de los errores se aprende... De todas formas en esa oportunidad por la ansiedad y la energía positiva que manejamos tampoco podemos decir que la hayamos pasado tan mal...
Como conté en mi instagram, mi equipaje no llegó al aeropuerto y tampoco sabíamos que podíamos reclamar una compensación por los gastos que conllevan esos retrasos. Si querés ver un poco más de esto, entrá acá.
Llegamos a Florencia, bajamos del avión, tomamos el Volainbus a la estación Santa María Novella al centro de Florencia y nos costó bastante encontrar el hostel. Nos alojamos en Leonardo House, que está ubicado en la Vía del Trebbio, una calle que tiene UNA SOLA CUADRA.... preguntamos a mucha gente que cruzamos y nadie la conocía.
En ese momento no teníamos google maps en los celulares, mucho menos datos móviles en roaming, cosa que hoy recomiendo bastante utilizar. Finalmente, encontramos el hostel, hicimos el check in, dejamos la valija de Agus - la mía obviamente no - y salimos a recorrer...
No les puedo explicar la emoción que sentimos al llegar al Duomo de Firenze... Todo el esfuerzo que habíamos hecho para ahorrar durante doce largos meses había realmente valido la pena no sólo porque estábamos en un lugar impactante, sino porque estábamos literalmente viviendo un sueño... uno que recién acababa de comenzar.
El centro histórico de Florencia es divino. El arte rodea toda la ciudad, de punta a punta y te dan ganas de recorrer cada centímetro para poder absorber todos los detalles de arquitectura, escultura y demás que están diseminados por la ciudad.
A pesar de ser repetitivo, tengo que decirlo, la catedral de Santa María del Fiore es imponente. Su enorme campanario, su puerta tallada a mano y sus paredes verde, blanca y roja que reproducen la bandera italiana me penetraron la retina con una imagen que hasta el día de hoy no puedo borrar.
El baptistero estaba en reparación lo cual no permitía apreciarlo del todo, pero nada opacaba la belleza y las sensaciones que nos invadían...
Esa misma noche nos dimos una escapada a la Pizza de la Signoría que es una construcción de roca que se asemeja mucho a un castillo medieval con su torre, aunque obviamente en un tamaño reducido. A pesar del cansacio, de las horas de viaje y la escala de ocho horas que se estiró un poco más por el retraso del vuelo interno en Italia, nos fuimos también al Ponte Vecchio.
Las fotos no permiten apreciar la verdadera belleza del puente. Es aun más imponente de noche que de día, porque las luces y el reflejo en el agua producen un efecto muy vistoso en él. De día, sobre el Ponte funcionan muchos localcitos de venden principalmente joyas de oro y relojes. Obviamente nuestro presupuesto no incluía ningún recuerdito de ese tipo - salvo algún llavero o imán que vendieran sobre el puente jaja - pero está bueno cruzarlo de día para ver el movimiento que tiene.
Al otro día nos levantamos temprano y nos fuimos a la Pizzale Micheangelo. Es el lugar que más disfruté de Florencia y las dos veces que volvimos a la ciudad en 2017 y 2019, tuve la necesidad de volver.
Es un mirador que permite tomar las mejores fotos de la ciudad desde mi punto de vista. Yo no soy un experto en la materia, pero pese a mis limitaciones podrán apreciar un poco de la belleza del lugar... los techos rojos en conjunto con la cúpula de la catedral son dignas de una obra de arte de alguno de los importantes pintores identificados con la ciudad... ¿Por qué no un Da Vinci o un Micheangelo?
Allí también se encuentra una réplica del David, precisamente de Miguel Angel, artista al cual se homenajeó con el nombre de la Pizzale. El David original también lo podés visitar en Firenze porque se exhibe en la Galería della Academia.
Esa primera vez estuvimos poco tiempo, sinceramente nos quedamos con ganas de más. El andar a las corridas no nos permitió hacer algún free walking tour (un tour caminando por la ciudad en cual el guía trabaja por las propinas que los que participan le dan al final del tour), que nos ampliara un poco sobre la historia de la ciudad.
Unos años después pudimos hacer dos y es altamente recomendable conocer no sólo la historia de la ciudad, sino también la de los Médici. Acá dejo páginas que ofrecen tours gratuitos. Fijensé que tienen distintas opciones, horarios e idiomas y elijan el que más les convenga! Hasta ahora todos los que hemos hecho, independientemente de la ciudad o empresa de la que se trate han sido muy copados.
La ciudad de los Medici no decepciona. No hay otro forma de definirla como una ciudad hecha arte, porque atraviesa absolutamente todo lo que vas a poder ver. No se si el encanto se debe a que fue nuestro primer suelo europeo, si Il Porcellino cumplió su profecía (mirá acá) o si simplemente nos enamoramos de ella.... pero cada vez que estuvimos cerca, por un motivo y otro volvimos....
Espero que les haya gustado este primer post... me extendía bastante para contar un poquito de esta city pero si llegaste hasta acá y tenés dudas, sugerencias o si simplemente querés hacerme saber que leíste todo el texto, dejame un comentario o un Me Gusta que va a ser muy agradecido!
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